2 de junio de 2010

Desamor


Sarah pasaba las horas pensando en él, su obsesión, su más grande deseo. Su cabello castaño suelto al viento, lagrimas en su cara. Ella estaba confundida, mas sabía lo que estaba pasando: el la dejaba.
Ella había tenido otros "amores", puras pasiones de hombres despiadados, sin sentimientos, solo buscando el placer o algún otro capricho egoísta. El era distinto, era honesto, era tierno, era gracioso... Era su media naranja. Mas no era de ella; su corazón no le pertenecía, como el de ella, le pertenecía a él.
La gente decía que no podía haberla enamorado, pues solo había pasado un año, mas ella le había entregado su corazón, después de tantas largas pláticas y sonrisas, había caído al amor. No segura de lo que ella sentía en ese momento, intentó pensar en su situación: la confusión; él no sabía que hacer, no quería lastimarla, pero no entendía si en verdad la quería, o si aun amaba a su ex-amor; si... Tenía una situación difícil...
Ella estaba dispuesta a darle todo, tiempo, comprensión, cariño; mas él no lo quería, solo amistad... Y ella, con un corazón destrozado, se tenía que conformar: una ilusión.
Pasó el tiempo y siguieron siendo amigos, sus heridas se curaron, y a él lo perdonó, mas ella siempre recordaba, muy dentro de sí, lo que pudo haber sido, y se perdió.
Porque el corazón perdona, pero jamás olvida, y deja heridas muy en el interior.
Miedo, de volverse a enamorar...



Stephanie Perez~~

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